Acostarse tarde y madrugar para cocinar; alistarse para ir al trabajo; pasar de ocho a diez horas diarias en una oficina y, en ocasiones, llevarse el trabajo a casa; es la rutina a la que estamos sometidos los latinoamericanos.
En el siglo XXI, el estrés es la enfermedad mental que puede llevarte a la depresión y como consecuencia al suicidio.
La OMS estima que, en el mundo, el suicidio es la segunda causa de muerte en el grupo de 15 a 29 años de edad y que cada año se quitan la vida más de 800.000 personas.
Los latinoamericanos están expuestos a la inseguridad, violencia, desempleo, desastres naturales; esto provoca que el ciudadano se encuentre constantemente estresado.
¿Y los efectos secundarios que acarrea el exceso de estrés?
Muchas personas se enferman constantemente y no son conscientes del causente principal de su recaída: el estrés.
Enfermedades mentales: Depresión, ataques de pánico, ansiedad, mal humor persistente que puede llegar a la violencia.
Insomnio: Estás en la cama, listo para dormir, pero tu cerebro sigue trabajando y planificando tu agenda laboral. Presentas debilidad física y mental debido a la falta de sueño.
Enfermedades físicas: Cuando el estrés llega a tu vida, está listo para quedarse.¿ La parte difícil? Controlarlo y no dejar que nos controle. Algunas personas sufren constantemente infecciones tanto en: vías urinarias, garganta, estómago; dolores de cabeza; estreñimiento; obesidad o diabetes. Las medicinas dejan de hacer su «efecto» y la depresión en la persona crece. Lo que no te han dicho los médicos es que tú puedes sanar tu cuerpo ¿Cómo? manejando tus emociones.
Adicción: Las personas se vuelven adictas a lo que les hace «bien.» Si la medicina que estás tomando te permite dormir o controlar los ataques de pánico; no dudarás en seguir consumiéndola. ¿Cuándo es el momento de dejarla? Muchos pacientes no conocen la respuesta porque tampoco han intentado soluciones más saludables, es por eso que cuando pruebas a dejarla, los síntomas persisten y; ahí nace la adicción.
¿Cómo prevenir el estrés?
- Correcta alimentación.
- Dormir ocho horas diarias.
- Hacer ejercicio (al menos 3 veces por semana)
- Practicar ejercicios de relajación como el yoga o la meditación.
- Relacionarse con personas positivas.
- Evitar el consumo de sustancias químicas, alcohol o cigarrillo. Solo dañarás tu cuerpo y con ello la mente.
- Evitar sobrecargas laborales.
- Tiempo de sana recreación.
La valeriana y el estrés.
Te estresas porque te preocupas demasiado por lo que será; se tensionan los músculos; dejas de dormir y no encuentras un equilibrio en la ansiedad.
Los homeópatas y quienes han probados sus propiedades, saben que la valeriana funciona como un sedante natural. La planta se la utiliza para tratar estados de nerviosismo y de estrés. Se recomienda tomarla en infusiones o gotas medicinales. Es muy útil en personas que padecen de insomnio.
Cuando dejas de sentir miedo de tu entorno a causa de la angustia; cuando paras de comer excesivamente por gula; cuando tu cuerpo ya no se enferma y los dolores musculares cesan; es cuando puedes pensar y actuar correctamente.